Pues tras mucho pensarlo al final me decidí ha realizar un crucero por los fiordos.
Si lo reserváis con tiempo no sale tan caro.
Me ha gustado mucho aunque lo que menos me ha gustado es el poco tiempo que te dejan en algunos puertos. Aun asi creo que ha merecido la pena.
Mi ruta...Copenhagen, Geiranger, Bergen , Kristiansand, Oslo, Wardemunde(Rostock), Copenhagen
Si alguno os animáis,tened en cuenta, ya que hay varias compañías y recorridos...
-Intentad que no incluya parada en Alemania . Rostock no tiene mucho que ver y es la parada mas larga. La explicación lógica es que en esta parada suben unos 2000 alemanes y bajan otros tantos
-Si esperáis ver la famosa piedra, el púlpito, aseguraros que el crucero incluye la parada en Stavanger.
-No merece la pena cambiar dinero, te aceptan la tarjeta de crédito para todo. En muchos lugares los precios también vienen en euros y te los aceptan pero no interesa el cambio que te aplican. Por cierto, es caro.
En nuestro caso , salimos de Madrid destino Copenhague, donde llagamos bajo una fina e intermitente lluvia. El trayecto en bus del aeropuerto al Barco es lo poco que vemos de la ciudad. Llegamos pronto pero entre que tomamos posesión del camarote, comemos algo , hacemos el simulacro de emergencia y el barco sale pronto, no es posible hacer ni una rápida visita a Copenhague.
Tenemos por delante un día entero de navegación, asi que vamos a tener tiempo para explorar el barco. El Costa Fortuna. Nos hace muy buen tiempo y mucho viento.
Vamos al norte viendo pasar la costa Noruega
Y a la mañana del tercer dia amanecemos dentro del Fiordo de Geiranger
La parada es larga y tenemos muchas ganas de ver cosas. Lo primero es la subida al monte Dalsnibba, a 1500 metros de altitud y donde aun hay medio metro de nieve. Hacemos la excursión con Costa pues la unica manera de llegar a la cima.
Las vistas son impresionantes
De vuelta en el pueblo, paseo y compras. Compras pocas por que todo es carisimo.
Despues de comer, el barco busca la salida del fiordo. Todos en cubierta viendo las cascadas aun y otro lado del barco.
Ojeando viejos números de la Revista Española de Historia Militar, he releído una carta de un lector donde cuenta , como este precioso buque, estaba abandonado en La Graña. Como para la Expo de Sevilla se estudio su restauración, incluso se traslado hasta Sevilla y como se acabo dejando abandonado a su suerte, sufriendo actos vandalicos e incendios.
Pues para sorpresa de todos, este buque fue comprado, y restaurado. Se encuentra en Glasgow y es un museo muy visitado y un atractivo turístico de la ciudad.
Bien por los escoceses , y muy mal como siempre para los españoles, que no aprendemos.
El 3 de diciembre de 1896 fue botado en el astillero Anderson Rodgers de Glasgow por encargo de la naviera Sterling and Company, precisamente donde se encuentra hoy en día. El casco era de acero en su totalidad, desplazaba 2757 toneladas, tenía una eslora de 74,87 metros, una manga de 11,85 y un puntal de 7,85 con un calado a proa de 5,20 y de 5,80 en la popa. La superficie vélica tenía unos 2800 metros cuadrados, repartidos entre 21 velas y un palo mayor de 54 metros de altura.Visto de costado era muy bonito y airoso.
Sus armadores lo llamaron "Glenlee" y lo usaron para el transporte de grano, con muchos viajes que unían Gran Bretaña con Australia, Nueva Zelanda y otros sitios del Pacífico. Despues de dos años de servicio fué vendido a otra naviera británica porque los dueños preferían la propulsión a vapor. Durante aquellos años España estaba en un momento difícil por los conflictos en las colonias que le quedaban.
En la nueva compañía cambió su nombre por el de "Islamount" y continuó con las rutas originales. Al estallar la Primera Guerra Mundial las estructuras británicas se alteraron y debido a la necesidad de buques de guerra fué requisado por la Royal Navy para el Servicio de Control de Buques, donde hizo su misión de un modo excelente. Cuando acabó la guerra, el Islamount volvió a las rutas de Oceanía.
En noviembre de 1919 hizo su último viaje con pabellón inglés. Hasta entonces tuvo mas de 5000 días de mar, 4 viajes de circunnavegación, atravesó el Cabo de Hornos 16 veces y un total de 15 viajes. Se puso en venta para la naviera genovesa Stella, Societá Italiana di Navegazione, donde recibió el nombre de "Clarastella". Los nuevos armadores le pusieron propulsión mecánica, poniéndole en la popa dos motores diesel Ansaldo, de 450 cv cada uno que accionaban dos hélices tripala en las aletas y con arbotantes de sujeción en la cola de los ejes y le daban un andar de 8 nudos. Otra modificaciones fueron la colocación de dos chimeneas, la eliminación de varias vergas, la mejora de los alojamientos de la tripulación y se instaló electricidad. Su pertenencia a la Marina Mercante Italiana fue muy corta (3 años) y precisamente por entonces en España se buscaba un velero con unas características específicas. En la Armada había otro barco de vela, el Nautilus que era buque-escuela, pero no tenía buenas condiciones para esa función, por lo tanto aprovechando los créditos de la llamada Ley Miranda buscaron un sustituto y por eso vino a España el Clarastella.
Comprado por 650.000 pesetas, siendo Presidente del Gobierno Antonio Maura y Ministro de Marina el Marqués de la Cortina,su compra provocó muchas quejas contra el gobierno,porque cualquier gasto para el ejército era mal visto por la ciudadanía, aunque en este caso es otra muestra de la ignorancia en cuestiones marítimas.
Se hizo una revisión en el Astillero de Cantieri Navale y de ahí zarpó a España; su primer puerto fué Cartagena con pabellón español el 14 de diciembre de 1922. El casco aún era negro y las autoridades navales lo llamaron "Galatea". Desde Cartagena lo llevaron a los astilleros Echevarrieta y Larrinaga de Cádiz, donde lo transformaron en Buque-Escuela de Guardiamarinas,según contrato de 30 de abril de 1923. Después de las reformas pasó a Tercera Situación, donde se colocó bajo el mando del Capitán de Fragata Ramón Martínez y Del Moral, su primer comandante.En 1925 comienzan los viajes del Galatea y por real orden de 14 de abril de 1926 se prueba el reglamento provisional para el ingreso y régimen de las escuelas de aprendices marineros especialistas, donde establece que el Galatea, junto con el Carlos V y el Nautilus quedan asignados a esa escuela. Hasta 1928 fué relevado por el Juan Sebastian Elcano en tareas de aula a flote, sustituyendo luego al Nautilus como Buque-escuela de maniobra. Por entonces le cambiaron los motores por unos diésel Atlas-Polar de 800cv y 100kw cada uno, dotándolo además de un grupo de emergencia con corriente contínua capaz de desarrolar 40 cv y 25 kw.
En su periodo de vida intermedio hay dos hechos relevantes: el primero en el verano de 1936 al estallar la Guerra Civil, estando en la mar con 49 guardiamarinas y 160 marineros consigió llegar a Ferrol burlando las posibles situaciones de bloqueo que podía tener en su derrota. El segundo en la II Guerra Mundial cuando fué seguido durante horas por un submarino alemán que navegaba cerca de su banda de estribor. Parece ser que los alemanes no se podían resistir a su silueta navegando. Hay que recordar que durante esos años llevaba en sus costados pintadas grandes banderas de España para distinguirse entre los demás barcos de países enfrentados en guerra.
El Galatea, con el casco blanco y la bandera española en el costado
Durante la posguerra el número de aprendices descendió por razones lógicas y el barco llegó a navegar con solo ocho estudiantes según un parte de operaciones del año 1941. A partir de 1946 el número de alumnos crece y comienzan las navegaciones por el Atlántico y Mar del Norte y visitas a puertos ultramarinos como San Juan de Puerto Rico,Savannah o Nueva York. En ese año de 1946, el 3 de octubre en uno de sus cruceros de instrucción, mientras iba de las Azores a Santa Cruz de La Palma sufrió un ciclón con vientos de mas de 175 km/h que pudo suponer el fin del barco, pero afortunadamente aunque destrozado se mantuvo a flote pese a sufrir escoras de 42º y meter varias toneladas de agua en su cámara de motores. Aquí se salvo de esa grave situación, pero luego vendrían otras mas graves y no precisamente en el mar.
Cuando se transformó en buque-escuela hubo de ser lastrado a fin de bajar el calado y tener una altura adecuada entre el centro de gravedad y el metacentro para mejorar sus condiciones marineras, pero ese lastre, que se hizo aplicando cajonadas de cemento a la sobrequilla y soldando a las planchas del costado lingotes de metal de varias toneladas de peso, impedía sobre todo en los últimos años un tratamiento adecuado de las planchas cuando se hacían reparaciones en la obra viva. Por ello y al mal estado de los fondos del barco, el alto mando decidió que quedase amarrado en el Arsenal Militar de Ferrol cuando hiciese su último viaje el 15 de diciembre de 1959. Por orden ministerial de 26 de diciembre pasa a primera situación,quedando como pontón-escuela de maniobra. De allí pasaría a la Estación Naval de La Graña,dentro de la misma ría y seguirían formándose los futuros contramaestres hasta mediados de los años 70.
Desde ese momento comenzó una larga historia de buenas voluntades y despropósitos continuados que estuvieron a punto de terminar con la vida del ya longevo buque. La Marina de Guerra no se decidía a ordenar su desguace, porque había infinidad de voces que se oponían a esa despiadada idea. Mientras tanto van desapareciendo cosas del barco, puede que mas a la nostalgia que al afán de lucro y se impone tomar una rápida decisión respecto a su futuro. Empiezan las especulaciones y posibilidades, pero mientras tanto, el Galatea va perdiendo sus portillos de bronce, la placa del mismo material que adorna la cámara del comandante, la bomba real de achique, motones, cabilleros, etcetcetcetc.....................En mayo de 1980 debido al mal estado en que se encontraba,tuvo que ser desalojado y nunca mas recuperaría su porte. ¡Un final triste! Incluso el presidente de la hermandad de marineros voluntarios elevó una propuesta al ministro de Marina Sr. Nieto Antúnez, que quería partir el barco y llevarlo a Madrid al lago de la casa de campo,pero afortunadamente la "idea" no prosperó.
Tras un largo periodo de inactividad se hizo una reparación de las planchas del casco en los astilleros de Bazán en julio de 1982. Mientras se hacían un sinfín de maniobras como por ejemplo buscar un método de salvamento con contactos con la Royal Navy, otros como el almirante Martel Viniegra hizo unas gestiones para que el Galatea quedase a flote y en España, al menos por unos años. En 1984 se interesaron por el barco ciudades como Sevilla, Barcelona, Santander, Palma de Mallorca y Ferrol, claro esta, siendo nosotros los que mas derechos históricos teníamos sobre el Galatea.
El Galatea en sus buenos tiempos en la Armada Española 1982.
La idea del almirante era adaptarlo para centro de comunicaciones en la expo de Sevilla, teniendo previsto su amarre junto a la Torre del Oro (en fin...). Se creo el patronato de San Telmo en el que estaban personalidades de todos los ámbitos de la sociedad de finales de los años 80. Tristemente, a finales de septiembre de 1985, el Galatea se va remolcado de Ferrol, otro de los múltiples despojos que sufrimos, y el almirante hizo la travesía completa de cuatro días enrolado como simple marinero y con el riesgo de transportar un casco tan deteriorado si las condiciones climáticas no era buenas. Pero las condiciones fueron buenas y el barco llegó a Sevilla. Una vez allí todos los proyectos se fueron al traste y con el paso del tiempo la estampa era lamentable: los palos ya no estaban en su cubierta, su mascarón desapareció y faltaban muchísimas piezas. Las negociaciones fracasaron porque la reparación era muy cara y el Galatea quedó atracado en los muelles de Astilleros Españoles, donde sufrió dos incendios y una inundación que le hizo varar en el lecho del río. Hubo otros intentos de salvarlo que quedaron en eso,en proyectos.
Con casi dos metros de agua en sus bodegas y las planchas inservibles,se decidió su venta en pública subasta. El 26 de febrero de 1992 no se pudo adjudicar por problemas legales y afortunadamente su ciudad natal se acordó de el y por medio de suscripciones voluntarias y otros sistemas de recaudación de fondos, consiguió salvar al buque de un inminente desguace para chatarra. El 31 de marzo se vendió en segunda subasta ¡POR 8 MILLONES DE PESETAS! al Clyde Maritime Trust, pagándose la factura el 30 de junio, momento en el que dejó de pertenecer al patrimonio español.
Esta noticia causó alegría por la salvación aunque también pena por la marcha a su país de orígen. Estamos a años luz de otros paises que salvaron barcos distinguidos como el Cutty Sark en Inglaterra, el Rickmer Rickmers en Alemania o el Vaasa en Suecia.
Desde Escocia se mandó un dique flotante a Sevilla y el 1 de junio de 1993 zarpó a Glasgow, su primer puerto de orígen y el último de destino. El viaje duró nueve días y el 6 de julio fué rebautizado como Glenlee.
Se hizo una inversión de 2 millones de libras y se consiguió la completa restauración.
Fuente: Priorio, foro piel de toro
Dato curioso, cuando se lo llevaron a Escocia para su definitiva restauración, los mástiles que llevaba el velero no eran los originales, remachados, sino unos de construcción soldada que a lo largo de su vida como buque escuela se le instalaron. Al contrario de lo que pasó con el mascarón de proa, la Armada buscó y rebuscó, y finalmente localizó todos los mástiles, vergas y perchas originales, y se los envió por container a los restauradores.
En la restauración se comenzó a eliminar el lastre sólido que llevaba entre las cuadernas, con la idea de que las varengas, vagras, cuadernas y forro se estarían pudriendo bajo el cemento. Pasaron más de un año picando y sacando lastre, para finalmente descubrir que el acero bajo el mismo estaba IMPECABLE. Tuvieron, lógicamente, que volver a lastrar el buque para devolverle sus condiciones de estabilidad, pero esta vez emplearon viejos barriles de Whisky escocés, macizados con hormigón.
Curioso, la última carga de este precioso velero ha consistido en barriles de Whisky escocés.
Estado del Galatea cuando fue vendido a los escoceses
Tras salir muy temprano de Jaca, para visitar las Cuevas de Betharram...
... pasamos la tarde en Tarbes.
Para situarnos, Tarbes se encuentra muy cerca de Lourdes y Pau.
Visitamos primero el Museo de los Hussard, Musee International des Hussards, que se encuentra en un palacete en los jardines Massey.
Foto Internet
Facil de encontrar y de aparcar en las inmediaciones. Llegamos sobre las 14:00 pensando que estaría cerrado, pero en Francia los museos cierran a las 17:00 h.
La encargada habla muy bien español, y hay una pequeña tienda en la entrada.
Al ir con mi hija , menor de edad , no nos cobran la entrada. (Me explico; si el adulto va con un menor, no paga entrada ninguno de los dos.)
El museo no es muy grande, pero si tiene mucho encanto y muestra las piezas con mucho gusto.
Una amplia colección de uniformes de Hussard, desde su creación, y de los países que los tuvieron en sus filas.
A escasos 5 minutos andando tenemos la Casa Natal de Mariscal Foch
Me sorprendió gratamente. Gratis.
La guía solo habla en francés. Nos mostrara la casa donde en la planta baja podemos ver diferentes regalos que le hicieron al Mariscal, tras ganar la IGM.
Nos enseñaran su dormitorio, sus libros, sus apuntes y notas del colegio y finalmente planos y explicaciones de las diferentes batallas de la IGM.
Viene a decir que Francia y el resto de paises estaban perdidos ante Alemania, ya a las puertas de Paris. Se llamo a Foch, casi como ultimo recurso y fue capaz de ganar la guerra con 2,5 millones de soldados a su mando.
Para los franceses un gran héroe, que esta enterrado en los Inválidos junto a Napoleón y otros ilustres franceses.
También muy cerca pudimos visitar el Museo de la Deportación y la Resistencia.
Gratis.
Consiste en un par de salas donde podemos ver con recortes , fotos , documentos y armas, un repaso desde la ocupación de Francia por los alemanes hasta la liberación. Tierra traída de diferentes campos de concentración, dibujos y artefactos realizados por los presos.
Un dia muy bien aprovechado.
Regresamos via Pau, donde vemos anunciado un museo que ya no nos da tiempo a visitar: